junio 16, 2011

Viajar para amar...

...o amar para viajar?


La distancia es un tema muy delicado, muy doloroso, muy "de estos tiempos" y es lo que no me gusta "de estos tiempos". Antes todo era más fácil, "la moda" ahora son las relaciones a distancia, porque es lo más fácil de conseguir, porque de repente se dio, porque conociste a alguien especial en un viaje y vive lejos de ti... porque "el amor" es así de ilógico, de irónico, de quién sabe qué más cosas. 


Muchas han sido las historias hermosas de relaciones a distancia que se consolidan con la mudanza de uno a la ciudad del otro y el famoso "felices para siempre". No se engañen, esa es la excepción, no es la regla. ¿A qué me refiero? Que no es que por el simple hecho de que otros hayan triunfado, todos lo harán; porque no podemos vivir las historias de otros, no podemos iniciar algo con la idea de un final como el de tal persona y el amor de su vida.


El amor a distancia es demasiado complicado, no es imposible, pero es complicado. No todos tienen la madurez de sobrellevarlo y, peor aún, casi nadie tiene la suerte de tener un final feliz. Claro está, que no por esto van a negarse rotundamente a vivirlo; a pesar de mis experiencias y de todo lo que digo y lo que demuestro, sigo apostando al amor, sea como sea, mientras haya sinceridad de por medio, claramente. Además, no podemos iniciar una relación pensando en que va a fracasar, en lo que puede pasar, en lo que podría ser si... no, la idea es vivir el aquí y el ahora, sin dejar a un lado el futuro, pero sin darle demasiada importancia como para privarte de vivir y experimentar.


Este loco mundo en el que vivimos... en este tema hay mucha tela que cortar, sólo estoy agarrando mi tijera porque ahora es que está llegando la ropa. Y la pregunta sigue abierta: ¿Viajar para amar o amar para viajar? Ustedes dicen.



Firmado y sellado.

2 comentarios:

  1. Un tema con mucha tela por cortar, creo que ambas cosas se deben hacer Viajar para amar y amar para viajar... Saludos

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  2. Estoy de acuerdo con Anita... Yo me enamoré por la web... y sucedieron las dos cosas... Tuve que amarlo mucho para viajar.. dejar mi familia, mi pais, mi empleo, mis amigos e irme a un pais donde mi unica referencia era El.
    Pero tambien viaje para amarlo, para descubrirlo, para darme cuenta que el hombre maravilloso que habia conocido por la web era solo una tercera parte de lo realmente maravilloso y especial que es en la realidad.
    Es un tema con mucha tela que cortar, pero en mi caso valió la pena.
    -un saludo

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Me siguen los buenos